Por Mariana Massa, de la redacción de NOVA.
El 24 de marzo es una jornada para reflexionar sobre la historia de nuestro país, creer que es sólo un día feriado y de descanso implica no comprender la propia realidad.
Para entender la historia de nuestro país, para comprender la última Dictadura y la Guerra de las Islas Malvinas, es necesario conocer que desde 1976 hubo un plan siniestro de acción, donde el discurso del gobierno era “imponer el orden” y que no hubo ninguna voz oficial que reconociera los crímenes atroces que se estaban cometiendo, como así tampoco se escucharon muchas voces disidentes dentro de la propia sociedad, sólo la de las familias de las víctimas. Así se explican seis años de una Dictadura con casi un total silencio e impunidad.
El 24 de marzo es una jornada para reflexionar sobre la historia de nuestro país, creer que es sólo un día feriado y de descanso implica no comprender la propia realidad.
Para entender la historia de nuestro país, para comprender la última Dictadura y la Guerra de las Islas Malvinas, es necesario conocer que desde 1976 hubo un plan siniestro de acción, donde el discurso del gobierno era “imponer el orden” y que no hubo ninguna voz oficial que reconociera los crímenes atroces que se estaban cometiendo, como así tampoco se escucharon muchas voces disidentes dentro de la propia sociedad, sólo la de las familias de las víctimas. Así se explican seis años de una Dictadura con casi un total silencio e impunidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario